Seguidores

martes, 13 de febrero de 2018

Bienvenido al desierto y la primera tormenta.

Después de aquél sueño y lo dispuesto que estaba Seth para guiarme y aceptarme, tome la iniciativa y entre en su culto, acepte a Seth como mi Faraón. Sin duda el caminar por el desierto no es fácil, como es de esperarse llego mi primera tormenta a los pocos pasos, una tormenta de ideas, conocimiento y sabiduría encontrándose y atacando, todo lo que paso en el sueño me puso a pensar entre lo que me han enseñado y lo que me fue enseñado, había algo ahí que no me cuadraba, realmente me encontraba algo confundido, pero parecía que todo lo que me dijo no era una enseñanza que se deba tomar a la ligera, parecía ser una prueba para ver que era capaz de hacer y como asimilaba todo. Debo agregar que encontré las 42 purificaciones Egipcia, eso me puso en alerta, realmente no quería y no quiero fallar en el camino, no quiero decepcionar a Seth, ni a nadie de los Dioses y Diosas.

Sin duda necesitaba un guía, pero solo estaba yo, así que utilice lo que sabia para encontrar la respuesta y salir de mi propia tormenta, realice otra meditación, está vez para llamar a Anubis, ya que no solo es el guía de los muertos en el Duat, también puede guiar a los vivos. la forma fue exactamente la misma que la de Seth, igualmente me imagine en un desierto, lleno de edificaciones, visualice a Anubis totalmente como un animal antropomorfo, lo visualice como me miraba con extrañeza y curiosidad, como me olfateaba con respeto y para reconocer mi olor, cuando su nariz estaba por mi cuello, con mi mano derecha le acaricie la cabeza mientras lo miraba con aceptación y cariño, baje hasta su cuello y de ahí hasta su pecho, luego hasta su hombro, bajando por su brazo, hasta llegar a su mano, una vez más todo fue muy real, sentía lo que tocaba, su pelaje, su musculatura, sus manos, sus garras, y le pregunte como debía moverme en mi camino y que tenía que tomar en consideración, termine visualizando a Anubis decidido a responderme y me dedique a terminar la meditación.  

Esa noche tuve el sueño donde se me dio la respuesta, Anubis se presento, lo vi como un ser totalmente negro, pero podía saber que era él por la figura que se formaba, me dijo; -Usa tus poderes para lo que quieras logras, pero no los uses actuando de forma desalmada ni bestial-. Con esas palabras lo entendí todo, y la tormenta de mis pensamientos se detuvo.

Paso un día y la siguiente noche volví a soñar con Seth, no se veía enojado, tampoco desilusionado, se veía norma y optimista, ese sueño fue normal, simplemente lo vi y me dijo; -Usa tus poderes para tú bien, para lo que gustes, no los uses con odio, rencor ni nada maligno, si tienes un problema que requiera ser destruido, controlado o sometido, de eso me encargo yo-. Las palabras de mi ahora Faraón me fueron de gran consuelo, y me dio a entender, que no fracase en mi primera tormenta. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario